jueves, 18 de octubre de 2012

EL JUEGO DE PELOTA



Se trata, tal vez, del deporte más antiguo del planeta que aún se juega en la actualidad. Surgió aproximadamente en el año 1500 a.C. y es precisamente la Cultura Madre, los Olmecas, quienes fueron los primeros en practicarlo; sin embargo, la cancha más antigua está ubicada en el Paso de la Amada, Chiapas, y data de entre 1400 y 1250 a.C.

La cancha en donde se llevaba a cabo este tan singular juego, tiene forma de hache (H) y simbólicamente, se creía que daba acceso al inframundo; se decía que en el campo de juego, los jugadores podían retar a los dioses de las tinieblas y así vencer a la muerte. Generalmente, en el centro de la cancha está ubicada una piedra que simboliza "el ombligo del mundo".

Las dimensiones de la cancha y las reglas variaba dependiendo la religión y la cultura; la más grande es la de Chichén Itzá con 140 x 35 metros, cabe destacar que  también es la mejor conservada y la más famosa debido a sus altos muros verticales y el relieve en el que se representan a los jugadores de pelota durante un sacrificio.

El juego consistía en que dos equipos de 1 a 7 jugadores, se enfrentaban en la cancha y tenían que golpear con la pelota de caucho uno de los 3 discos de piedra distribuidos en el campo o pasarla por los aros suspendidos de las paredes; también se recibían puntos cuando el equipo contrario golpeaba la pelota con una parte del cuerpo no autorizada. La pelota, de aproximadamente 20 cm. de diámetro, era muy pesada (3kg.) y dura, sólo podía ser golpeada con los codos, la cadera y las rodillas. Debido a que era muy difícil pasar la pelota por el aro, cuando esto ocurría el partido terminaba y el jugador que lo había anotado, era premiado. El capitán del equipo victorioso alcanzaba el honor y la gloria, por lo que podía ser ofrendado a los dioses.


“... y el que metía la pelota por allí ganaba el juego; no jugaban con las manos sino con las nalgas herían a la pelota; traían para jugar unos guantes en las manos, y una cincha de cuero en las nalgas, para herir a la pelota.”
(Fray Bernardino de Sahagún)

Cabe mencionar que el anillo formó parte del juego mucho tiempo después, investigadores afirman que surgió aproximadamente en el 900 d.C.; sin embargo, jugó un papel fundamental ya que el punto más valioso se lograba al hacer pasar la pelota a través de él.

Simbólicamente, el juego representa la interminable lucha de contrarios, la lucha de opuestos: entre la luz y la oscuridad, entre el Sol y la Luna… La cancha representa el universo en donde se llevará acabo la batalla. El sacrificio humano es el que mantenía el equilibrio y permitía el orden; según las creencias, la sangre derramada sobre la cancha aseguraba la fertilidad de la tierra.

Aún hoy en día no se sabe a ciencia cierta si era el ganador o el perdedor el que era sacrificado, pero lo que si se sabe es que los sacrificios se llevaban  a cabo para mantener el equilibrio y el orden y así lograr que continuara la existencia del cosmos y la vida.

Samantha Aguilar

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